El movimiento Soberanxs ante la crisis, la inflación en crecimiento y el nuevo capítulo
de negociación con el FMI que implica más ajuste, reducción abrupta de subsidios,
achicamiento del gasto social y el estado, publicó en un documento bajo el título
“El cogobierno con el FMI es más inflación y más ajuste”.

A la vez solicitó a los partidos integrantes del Frente de toda una reunión urgente
ante la grave situación económica y social: “La situación es muy grave tanto por el
continuo crecimiento de la inflación que castiga todos los días como por el acuerdo con
el FMI que en su nuevo capítulo exige más ajuste, más quita de subsidios, achicamiento
del gasto público. Para nosotros la deuda es impagable, el acuerdo con el fondo
inflacionario y una verdadera estafa que se completó con la fuga.
Es urgente concertar un cambio de rumbo pensando en el país, por eso solicitamos
reunirnos de forma urgente.”

El sentido del préstamo estaba centralmente ligado a generar esta forma
compartida de gobierno con el Fondo que estamos criticando y desde allí
apropiarse aún más de nuestras riquezas, de nuestra energía, de Vaca Muerta,
del litio, de nuestras riquezas agropecuarias, las reservas de agua, los llamados
minerales raros.
Cuando le prestaron al gobierno de Cambiemos 44.599 millones de dólares, que
se sumaban al fuerte endeudamiento de dicho gobierno que en total acrecentó
la deuda externa en más de cien mil millones de dólares, sabían no se podía
pagar. Ni en los tres años que acordó el gobierno de Cambiemos, ni en los diez
que acordó el gobierno de Alberto Fernández y que hizo refrendar por ley.
La deuda externa Argentina en diciembre de 2015 era equivalente a 222.703
millones de dólares, el 60% de la misma era intra sector público (en poder de la
ANSeS, de los bancos oficiales, de los fondos fiduciarios argentinos, etc.), 9%
con organismos internacionales (sin contar el FMI al que se le había pagado
todas las acreencias en enero de 2006) y 31% con el sector privado.
En diciembre de 2019 pasó a ser de 320.630 millones de dólares, el 40% de la
misma intra sector público, 22,7% organismos internacionales (mayormente el
FMI por 44.599 millones de dólares) y 37,3% sector privado. La deuda se
incrementó en más de 100.000 millones de dólares durante la gestión de
Cambiemos y desmejoró sensiblemente su distribución, sobre todo por la
perentoriedad de los plazos.
Es una deuda impagable como la demuestran el cronograma de pagos
establecidos, es inflacionario destruyendo la economía de las familias. Y
una pérdida de soberanía fiscal, monetaria y de achicamiento democrático
vía los condicionamientos.
Con fecha 21 de mayo de 2020 el BCRA publicó el Informe «Mercado de cambios
deuda y formación de activos externos, 2015-2019” y demuestra que de la deuda
tomada en la gestión de Cambiemos, la “fuga de capitales” del período
comprendido entre diciembre de 2015 y octubre de 2019 alcanzó los 86.200
millones de dólares.
Es más, ese Informe sostiene que en total, 6.693.605 personas físicas y 85.279
personas jurídicas (empresas) compraron los 86.200 millones de dólares durante
la gestión de Cambiemos, pero los 100 mayores compradores de dólares, que
son sociedades anónimas, adquirieron 24.679 millones de dólares
Ni el BCRA (que armó el listado), ni el gobierno nacional dieron a conocer los
nombres de los que compraron las divisas en que se endeudaba el Tesoro de la
Nación de la gestión de Cambiemos, pero sí lo hizo el semanario digital “El
Cohete a la Luna” en una nota titulada “Los 100 de Macri”, del 24 de mayo de
2020, lista jamás desmentida por los interesados ni por el BCRA. Entre esos

grandes fugadores están Telefónica Argentina SA con 1.248,2 millones de
dólares y Pampa Energía SA con 903,9 millones de dólares; Monsanto Argentina
SA (donde hizo toda su carrera Gustavo Idígoras, actual Presidente de CIARACEC y conspicuo miembro del Consejo Agroindustrial Argentino); Grupo Clarín
con Directv Argentina S.A. y Telecom Argentina SA; el grupo Techint con
Ternium.SA, Tecpetrol SA; y Transportadora Gas del Norte; Hidrovía Paraná SA
(que es la empresa que tiene la concesión del dragado del Río Paraná); Aceitera
General Deheza, una de las grandes beneficiadas con las privatizaciones y
concesiones del menemismo, Arcor SA de la familia Pagani; el Grupo Galicia de
los Braun, Ayerza y Escasanny; el Banco HSBC; entre otros.
Igual sucede con las personas, donde 100 compraron 822,6 millones de dólares,
entre ellos Néstor Ick de Santiago del Estero que compró 29 millones de dólares;
o el tucumano Emilio Luque que compró 17,8 millones de dólares; también los
Eskenazis de YPF y del grupo Petersen; Claudio Belocopit del Siwf Medical; los
Werthein socio de Blackrock en Pampa Energía; o de Mauricio Filiberti, socio de
Vilas y Manzano en EDENOR SA, sin embargo no se constata si en sus DDJJ
de impuesto contabilizan esa compra.
Como hemos venido sosteniendo la mega deuda externa y la fuga de
capitales producida son parte de una misma estafa que se hizo a sabiendas
contra los intereses de la Argentina.
La revisión trimestral fue aprobada por el Fondo y en estos días se propagandizó
el acuerdo de Massa con el FMI que flexibilizaba las metas de reservas, cuando
en realidad el eje del acuerdo es más ajuste en subsidios y en el gasto público
en general, que agravaba y agravará aún más la situación de nuestro pueblo.
Si se le suma que el acuerdo contiene la exigencia de tasas reales positivas que
funciona como desincentivo directo al consumo, a la inversión productiva y al
crecimiento económico, a lo que se agrega la presión devaluatoria, todo funciona
como promotor de la inflación que es una política de ajuste constante contra las
mayorías.
Nuestra propuesta se basa en recuperar la Soberanía perdida
• Antes de pagar como estamos haciendo, sujetándonos al plan del FMI,
se debe investigar la deuda para deslindar cual es deuda y cual un
ilícito tanto del FMI como del gobierno anterior, y para sancionar a
los que ilegalmente permitieron la fuga y recuperar los fondos de
quienes la fugaron.

• Aprobar el Proyecto de ley del Frente de Todos que ya tiene media
sanción del Senado y tiene dictamen de mayoría en las dos comisiones
que trataron el tema (Legislación General y Presupuesto y Hacienda) en
la Cámara de Diputados de la Nación, donde crea un fondo en dólares
para la cancelación de la deuda con el FMI, que se va constituir con las
cuentas en el exterior no declaradas al fisco. Los objetivos del proyecto
son claros: Primero, que la Argentina pueda resolver la crisis de deuda
que generó el gobierno de Cambiemos, sin resignar el objetivo de
crecimiento con inclusión social e industrialización.
Un segundo objetivo es dotar de racionalidad, previsibilidad y certidumbre
a los actores económicos, que en el futuro sabrán a qué atenerse y sepan
que el Estado fiscaliza y controla la evasión y la fuga y, cuenta con medios
para multarlos por ese accionar. Y, por último, contribuye al combate
global contra el ocultamiento de activos.
• Detener las políticas de ajuste. Instalar como acción política central un
shock distributivo, que permita paliar la situación social, recuperar el
valor adquisitivo de salarios y jubilaciones y fortalecer la producción y el
mercado interno. Salir de la reinstalada y fracasada política neoliberal del
derrame donde el crecimiento enriquece a unos pocos y los trabajadores
son cada vez más pobres.
• Luchar contra la inflación es enfrentar la cartelización y la concentración.
Es detener las políticas de dólares sectoriales que promueven la
devaluación. Es desarrollar un programa integral. Es inviable la economía
productiva, la organización de las familias y la vida en comunidad con una
inflación del 6,6% que anualizada llega al 102%. No es posible la
seguridad, la paz social, la previsibilidad económica ni social con estos
niveles de inflación y desigualdad.
Soberanxs ha propuesto una Plan para la Patria, un verdadero programa que
contiene los ejes para una gran conversación de nuestro pueblo donde anida la
posibilidad de un cambio de rumbo y de proyectar un futuro de desarrollo, justicia
social y soberanía.
Argentina, 15 de marzo de 2023